Como cada año nos encontramos en
estas fechas a punto de empezar las comidas sabrosas y a la vez copiosas de las
fiestas.
Un día a la noche cenamos
canapes+calamares rellenos+vino y cava+turrones+frutos secos, etc.
Al día siguiente nos levantamos con
una reserva en el estómago para 4 días y decimos que no vamos a comer mucho y
cuando llegamos a casa de los familiares o amigos y nos reciben con esos manjares
tan
suculentos, empieza de nuevo el atraco.
Cuando parece que levantas cabeza y
has entrado en un nuevo año, aparecen los reyes. Hasta que no han pasado esos
días no decidimos hacer nada, solo comer, sentarnos, etc.
A principios de enero el consumo de alimentos
bajos en grasa aumenta, los gimnasios rozan su aforo y l@s dietist@s están en
auge.
Siempre nos gusta todo a última hora,
esperando resultados en poco tiempo.
Pues bien, ¡os traigo una propuesta!
Que me decís si en vez de esperar a
empezar algo en enero, empezáis ya.
Llegareis renovados para estas
comidas en aspecto, salud y vitalidad y posteriormente no os costará empezar
porque ya lo habréis hecho antes.
Primero empieza a comer equilibrado y
a comer alimentos que depuren tu organismo, como por ejemplo mucha verdura y
fruta.
Puedes ayudarte de plantas para
hacerte infusiones, que te limpien el hígado como el boldo, alcachofera, cardo
mariano, etc.
Bebe mucha agua, de vez en cuando exprímete
un limón en un vasito de agua, también te ayudará a limpiar toxinas.
Practica deporte, cada día.
Combínatelo.
Si un día sales a correr, al día siguiente ves a caminar para no
sobrecargar tus rodillas. Al otro por ejemplo puedes ir en bici y ejercicios en
casa o gimnasio. Si solo puedes ir a caminar, pues ves a caminar, tú cuerpo ya
se estará moviendo. Sube cada día el ritmo y la intensidad.
Cuando al final lleguen las fechas
navideñas puedes equilibrar tu ingesta. Por ejemplo, si el 24 de diciembre
sabes que tu cena va a ser pesada, ese día equilibradamente comeremos cosas que
nos aporten menos calorías y sean más digestivas, para ayudar al estómago a que
pueda trabajar mejor.
Una vez en el banquete, os recomiendo
que el pica pica os lo pongáis en el plato, porque así realmente veis y saboreáis
poco a poco lo que coméis.
Si a la mañana siguiente no tenéis
hambre, intentar comer algo, ya que vuestro organismo necesita alimento para
trabajar correctamente.
Un zumo o pieza de fruta y una
infusión para depurar.
Si el 25 a las 19.00 de la tarde ya estáis
fuera en la calle, aprovechar para caminar y bajar toda la comida. Cualquier
momento es bueno.
Aunque por la noche debéis tener en
cuenta que vuestro cuerpo ha de descansar y si lo exponéis a una actividad dura
os costará conciliar el sueño porque estaréis muy activos.
Si sigues estos consejos cuando
llegues a enero no tendrás que esperar a decir año nuevo, vida nueva. Rompe
esquemas. Ya estarás más que preparado para seguir con tu nueva vida saludable
que has empezado ahora mismo y no aquella que empezarás el día de mañana y que
tiene fecha de caducidad.
La palabra no es renunciar, porque no
has de prohibir tu vida, sino de entender lo que tu cuerpo necesita para
trabajar bien y estar en forma.
Preparado… empieza ya
Espero que os haya gustado y compartáis
vuestra opinión con nosotr@s.
Nos vemos en el próximo post, ahora
marcho a running.
¡Felices y saludables fiestas!